Tu energía no es ilimitada, aprendé a administrarla

No sos una máquina. Tu energía tiene ciclos, altibajos y momentos de recarga. Forzarte a rendir siempre igual solo lleva al agotamiento.

Administrar tu energía es tan importante como administrar tu tiempo. ¿En qué momentos del día rendís mejor? ¿Qué actividades te recargan?

Elegir cuándo y cómo usar tu energía

• Escuchá tus ritmos naturales.
• No todo lo urgente es importante.
• Reservá energía para vos, no solo para el trabajo.

Nutrir tu energía es estratégico, no egoísta. Si vos no la cuidás, nadie más lo va a hacer por vos.